Este sábado, antes incluso de que amaneciera, ya se respiraba tradición en las inmediaciones de la Plaça de Sant Roc. El inconfundible olor a leña anunciaba lo que estaba por venir: la esperada Caldera de la Comissió Gent del Bou, una cita gastronómica y festiva que se ha consolidado como imprescindible en el calendario de El Puig.
Fieles a la costumbre, los miembros de la Comissió comenzaron a preparar este emblemático plato desde bien temprano. A las 7 de la mañana, con el fuego encendido, tres grandes ollas empezaban a hervir para alimentar a más de 500 personas. La elaboración, como manda la tradición, se prolongó durante horas, añadiendo ingredientes poco a poco y cuidando cada detalle.
Almuerzo, tradición y buena compañía
Mientras las calderas seguían su curso, la sede de la Comissió se llenaba de vida. Sobre las 9:30 horas, comenzaban los preparativos para el almuerzo: bocadillo de longanizas, chistorras, patatas y huevos, acompañados por olivas y cacahuetes que llenaban las mesas en un ambiente familiar y acogedor. La sede, decorada con imágenes que rinden culto al toro y guardan recuerdos de años de pasión por els bous al carrer, se convirtió en un punto de encuentro para vecinos y amigos.
Tuvimos el honor de compartir ese almuerzo con ellos, y desde el primer momento nos acogieron como a uno más. Buena gente, sin duda. Nombres como Ramón, Rafa, Adrián, Rómulo, Domingo, Llorenç, Juanki, Bleinda, Natalia, José Seco y muchos más formaron parte de una jornada que respiraba unidad y tradición.
Música, fiesta y sabor en las calles
A partir de las 13 horas, con el ambiente animado por el DJ, la calle comenzó a llenarse de vecinos que se acercaban para recoger su ración y disfrutar de la fiesta. El buen ambiente, la música y la compañía hicieron de esta jornada un verdadero éxito.
La caldera estaba buenísima, y el evento fue todo un éxito que empuja a la Comissió Gent del Bou a seguir trabajando para ofrecer unos festejos taurinos de calidad. Esta cita gastronómica ya se ha convertido en una tradición consolidada en el municipio, donde la pasión por els bous al carrer se mezcla con el sabor de nuestras raíces.
Desde aquí, un agradecimiento especial a Juanki, presidente de la Comissió, por su atención y por explicarnos el gran trabajo que realizan durante todo el año. Fue un placer acompañaros en este día tan especial.
¡Enhorabuena por mantener viva la tradición!
Agradecimiento desde la Comissió
Desde la Comissió Gent del Bou, quieren expresar su más sincero agradecimiento a todos los vecinos que participaron en las Calderas y colaboraron de una forma u otra para que esta jornada fuera un éxito. Cada gesto ha contribuido a fortalecer esta tradición que une al pueblo en torno a la gastronomía y la pasión por els bous al carrer.
La Comissió destaca que el apoyo vecinal es fundamental para seguir creciendo y mantener vivas las costumbres que definen la identidad de El Puig.
¡Gracias a todos por hacerlo posible!
Una verdadera familia unida por la tradición
La Comissió Gent del Bou no es solo un grupo de aficionados a los bous al carrer, es una verdadera familia. Madres, padres, hijos e hijas forman parte activa de la organización, compartiendo tareas, recuerdos y emociones. Es un orgullo ver cómo las tradiciones se transmiten de generación en generación, manteniendo viva la esencia de El Puig.
El trabajo que realizan durante todo el año para preparar los festejos taurinos es admirable, lleno de esfuerzo, dedicación y pasión. Durante nuestra visita, nos acogieron con los brazos abiertos, haciéndonos sentir como en casa. Esa hospitalidad, ese ambiente familiar y esa entrega colectiva son el alma de Gent del Bou.
¡Gracias por compartirlo con todos nosotros!
