El Real Monasterio de Santa María de El Puig fue escenario este fin de semana de los actos institucionales de la Real Orden de Caballeros de Santa María de El Puig, que reunieron a autoridades, asociaciones, familiares y vecinos en torno a una de las tradiciones más emblemáticas de la localidad.
Actos del sábado: Vela de Armas y Cena de Hermandad
La programación comenzó el sábado por la tarde con la concentración de caballeros y damas neófitos en la Saleta de Caballeros, seguida de la procesión hacia la Capilla del Claustro Bajo. Allí se celebraron la Exhortación, Oración y Vela, junto con la bendición de hábitos, lazos e insignias. La jornada concluyó con la tradicional Cena de Hermandad en los Salones Huerto de Santa María, abierta a familiares y amigos, que permitió compartir un espacio de convivencia y fraternidad.
Domingo: Investidura y ceremonia central
El domingo se vivió el acto más esperado: la solemne Investidura de nuevos caballeros y damas, presidida por el Excmo. y Rvdmo. Sr. Obispo Auxiliar de Valencia, Don Arturo Javier García Pérez. A las 11:30 h se formó la procesión en el Claustro Alto y, tras la recepción de autoridades e invitados, se procedió al cruzamiento, imposición de hábito y juramento de los nuevos caballeros, así como la imposición de lazo a las nuevas damas y las elevaciones a grados superiores.
Entre los investidos destacó especialmente Jaime Casas Poy, vecino de El Puig, quien expresó su emoción tras recibir la capa y la cruz de la Orden:
“Para mí, ser investido caballero en el municipio donde he nacido y crecido es un honor inmenso. Este reconocimiento no es solo personal, sino también un compromiso con mis raices, con su historia y con las personas que forman parte de él. Quiero agradecer de corazón a todos los miembros de la Real Orden por el trabajo que realizan año tras año para mantener viva esta tradición. La dedicación y el esfuerzo que ponen en cada detalle hacen que actos como el de hoy sean inolvidables. La fraternidad que se respira en cada ceremonia es un ejemplo de hermandad y servicio, y me siento orgulloso de poder formar parte de esta gran familia.”
Jaime añadió sobre lo vivido en el Monasterio: “El momento de la imposición del hábito y el juramento fue profundamente emotivo y estar acompañado en este acto por mi familia y por mis amigos de siempre ha sido genial. Es un recuerdo que llevaré siempre conmigo.”
La jornada contó también con la presencia de representantes de la Asociación Casal de la Pau, cuya participación reforzó el carácter social y solidario de los actos.
Los actos concluyeron con la procesión de salida y el tradicional almuerzo de hermandad en los Salones Huerto de Santa María, donde se celebró la incorporación de los nuevos miembros y las elevaciones de grado.
Tradición y agradecimiento
Con ceremonias como la Vela de Armas del sábado y la Investidura del domingo, la Real Orden de Caballeros de Santa María de El Puig reafirma cada año su papel como referente cultural y social. Su labor resulta fundamental para mantener vivas las tradiciones, preservar la memoria histórica y transmitir valores de solidaridad y hermandad a las nuevas generaciones.
Desde este periódico agradecemos profundamente el esfuerzo de la Orden, que con dedicación y compromiso sigue fortaleciendo el vínculo entre historia, espiritualidad y comunidad, convirtiendo cada acto en un legado compartido que enriquece la identidad local.
